martes, 8 de marzo de 2011

¿CUÁL DE LOS DOS MICRORRELATOS OS PARECE MÁS RÁPIDO?

Presente
Saco la moneda del bolsillo con el cuidado de mis dos manos, lo hago sólo para observarla un segundo. Contemplo su brillo. Al segundo siguiente voy a meterla de nuevo en el bolsillo de mi pantalón descosido pero por causa del destino la moneda sale disparada al suelo. Rueda una palma de mi mano, rueda una zancada, otros 30 centímetros, amaga con caerse, parece asustarse bajo el bufido del coche rojo, incluso me parece que rueda marcha atrás al toparse con el baboso hocico de un pastor alemán. Pero sólo rueda otro segundo más, sigue rodando 50 centímetros más allá hasta la cuneta del asfalto, justo en la rendija de una alcantarilla para caer al fondo de todos los estómagos vacíos que no son el mío.

Pretérito perfecto
Saqué la moneda del bolsillo con el cuidado de mis dos manos, lo hice sólo para observarla un segundo. Contemplé su brillo. Al segundo siguiente fui a meterla de nuevo en el bolsillo de mi pantalón descosido pero por causa del destino la moneda salió disparada al suelo. Rodó una palma de mi mano, rodó una zancada, otros 30 centímetros, amagó con caerse, pareció asustarse bajo el bufido del coche rojo, incluso me pareció que rodaba marcha atrás al toparse con el baboso hocico de un pastor alemán. Pero sólo rodó otro segundo más, siguió rodando 50 centímetros más allá hasta la cuneta del asfalto, justo en la rendija de una alcantarilla para caer al fondo de todos los estómagos vacíos que no fueran el mío.

domingo, 6 de marzo de 2011

EL MANIFIESTO ROMÁNTICO MÁS HERMOSO: WORDSWORTH

He dicho que la poesía es el espontáneo desbordamiento de intensas emociones y tiene su origen en la emoción rememorada en estado de tranquilidad: la emoción es contemplada hasta que, por una especie de reacción, la tranquilidad desaparece gradualmente y una emoción, semejante a la que existió ante el objeto de la contemplación, va apareciendo paulatinamente hasta cobrar una existencia real en el pensamiento. En esta disposición de ánimo suele comenzar la composición afortunada, y en una disposición similar a ésta se continúa; pero la emoción, sea de la clase y del grado que sea, procedente de causas diversas está investida de placeres diversos; por eso, al describir de forma voluntaria cualquier tipo de pasiones, el entendimiento se encontrará por regla general en estado de placer. Ahora bien, si la naturaleza es tan precavida en preservar en estado de placer a un ser así destinado, el poeta debería sacar provecho de la lección que de este modo se presenta ante él, y debería sobre todo cuidar de que, cualesquiera sean las pasiones que él comunica a sus lectores, dichas pasiones, si el entendimiento de éstos es sano y vigoroso, vayan siempre acompañadas de un aumento de placer.

W. Wordsworth, Prólogo a Baladas Líricas, Hiperión, 1999, pp. 85-87.




El conocimiento de ambos, poeta y científico, es placer; pero el conocimiento de uno está unido a nosotros como parte esencial de nuestro ser, como nuestra natural e inalienable herencia; el otro es una adquisición personal e individual que nos llega poco a poco y que nos relaciona con los demás seres humanos por medio de una afinidad que no es directa ni habitual. El científico busca la verdad como un benefactor remoto y desconocido […] El poeta, entonando una canción a la que se unen todos los seres humanos, se deleita en la presencia de la verdad como nuestro amigo invisible y nuestro compañero de cada hora.
Ibid., p.69.