Le llamaron Brisa, sin ninguna razón en especial. quizá sus padres tan solo querían ser originales, pero se tomaron tan a pecho su nombre que creció siempre liviana, casi transparente, hasta desaparecer cierto día abandonándoles en la duda de si existió alguna vez.Mar GonzálezPenélope sigue esperando
Penélope espera en la cola del supermercado. Después de veinte años esperando, empieza a creer que ha aprendido a esperar: a esperar a que Telémaco vuelva del colegio; a esperar ese momento libre del día, que nunca llega, para pensar en ella; a esperar a que Odiseo vuelva de su viaje de negocios, a la ciudad de Troya, y le regale ese fin de semana romántico lejos de las costas de Ítaca. Y sabe esperar porque ha aprendido que una mujer se casa con un hombre y con sus proyectos, y que un hombre se casa con una mujer, y con sus horarios, y con sus normas domésticas, y con sus reproches. Penélope sigue esperando porque solo espera que Telémaco, y tal vez también Odiseo, algún día le lleguen a admirar.Íñigo Rubio Zavala
viernes, 28 de octubre de 2011
TEXTOS DE LA SESIÓN "LOS MITOS SIEMPRE ENCARNADOS"
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